El Ecónomo general administra los bienes que no pertenecen a una provincia o casa específica, sino a toda la sociedad.
Coordina y supervisa a las administraciones provinciales, para que su gestión responda a las necesidades de la pobreza religiosa y al servicio de la misión salesiana.
Asegura que se cumplan las reglas necesarias para una correcta administración. (Const. Art. 139)